Curiosidades sobre la Estatua de la Libertad, inspirada por la diosa pagana romana Libertas
La Estatua de la Libertad en Nueva York es uno de los monumentos más icónicos del mundo, pero pocos saben que su inspiración proviene de la diosa pagana romana Libertas.
Aquí te presentamos nueve curiosidades sobre esta fascinante conexión histórica:
La Estatua de la Libertad fue un regalo del pueblo francés al pueblo estadounidense en 1886, en conmemoración del centenario de la Declaración de Independencia de Estados Unidos.
Frédéric Auguste Bartholdi, el escultor francés detrás de la estatua, se inspiró en la diosa romana Libertas, quien personificaba la libertad, la democracia y la emancipación.
La corona que lleva la estatua representa los siete mares y continentes del mundo, simbolizando la universalidad de los ideales de libertad y democracia.
Libertas era adorada en la antigua Roma como la protectora de los esclavos liberados, lo que conecta directamente con el mensaje de libertad de la Estatua de la Libertad.
La antorcha que levanta la estatua simboliza la luz de la libertad que brilla en todo el mundo, guiando a aquellos que buscan un futuro mejor.
La estatua mide 93 metros de altura, contando desde el suelo hasta la punta de la antorcha, convirtiéndola en uno de los monumentos más altos del mundo.
Durante la Primera Guerra Mundial, la estatua fue cerrada al público y la antorcha se apagó para evitar ser utilizada por barcos enemigos como punto de referencia.
En la base de la estatua se encuentra inscrita la fecha de la Declaración de Independencia de Estados Unidos, reforzando su conexión con los valores fundamentales de libertad y autodeterminación.
La Estatua de la Libertad ha sido un símbolo de esperanza e inspiración para inmigrantes de todo el mundo que llegan a América en busca de una vida mejor.