El Castillo de Houska La leyenda que lo convierte en la puerta al infierno
El Castillo de Houska, ubicado en la República Checa, es uno de los sitios más enigmáticos de Europa. En este castillo se cuenta una leyenda que lo conecta directamente con la entrada del infierno. Se dice que su ubicación fue muy estratégica, ya que fue construido en un lugar donde se encontraba una cueva que era considerada como la puerta que llevaba a las profundidades del infierno.
La leyenda cuenta que el propósito de construir el castillo en ese lugar fue precisamente para sellar la entrada al infierno. Las historias que se narran sobre la cueva aseguran que al principio, aquel que se aventuraba a explorarla nunca regresaba. Se decía que en las profundidades de la cueva habitaban seres demoníacos y que por eso nunca habían sido exploradas ni descubiertas.
La construcción del Castillo de Houska se inició en el siglo XIII por orden de Ottokar II de Bohemia y fue adjudicado a la familia Berka. El castillo fue utilizado como fortaleza para protegerse contra invasiones externas, pero también se cuenta que fue utilizado como un lugar de experimentos extraños.
La parte más inquietante del castillo es la capilla que contiene. Se rumorea que en el interior de la capilla se encuentran criaturas monstruosas custodiando el lugar. Los habitantes de la región cuentan que cuando se construyó el castillo, la cueva que estaba en el corazón de la montaña se usó como un vertedero para desechar todo lo relacionado con la investigación y experimentación que se llevó a cabo.
El Castillo de Houska es un sitio muy visitado y muchos turistas van allí para experimentar la mística y el misterio de este lugar. Se cree que la puerta sellada que se encuentra en los sótanos del castillo se utiliza como un portal a dimensiones paralelas. Aunque la mayoría de los visitantes encuentran la idea de que el castillo se construyó en la entrada del infierno un poco escalofriante, sigue siendo un lugar fascinante para visitar.