El viaje de los doce cubanos a Florida
El 16 de julio de 2003, un grupo de doce cubanos se embarcó en un viaje peligroso desde Cuba hasta Cayo Hueso, en Florida, Estados Unidos. Su destino final era reunirse con sus familiares y comenzar una nueva vida lejos de la opresiva dictadura cubana.
Para llevar a cabo este viaje, los doce cubanos transformaron un camión Chevrolet 3800 de 1951 en una embarcación. Colocaron tambos de 200 litros alrededor del vehículo y una hélice conectada a la barra cardan para impulsar el camión por el agua.
El viaje fue lento pero seguro, a una velocidad de 20 kilómetros por hora. Los doce cubanos navegaban por las aguas del estrecho de Florida, evitando la patrulla costera cubana y las fuerzas de seguridad estadounidenses.
Después de varias horas de navegación, el camión convertido en embarcación alcanzó la costa de Florida y los doce cubanos desembarcaron en Cayo Hueso. Su sueño de comenzar una nueva vida había sido cumplido.
Este viaje simbolizó la lucha de muchos cubanos por escapar de la opresión del régimen cubano y buscar una vida mejor en Estados Unidos. El peligro del viaje y el riesgo de ser interceptados por las patrullas costeras cubanas y las fuerzas de seguridad estadounidenses no disuadieron a estos doce cubanos de luchar por su libertad.
Aunque este camino no es el adecuado ya que es ilegal y peligroso, muchas personas se enfrentan a estas situaciones debido a la necesidad de huir de su país y encontrar una nueva vida.